Paradigma conductista:

(E-R)=estímulo-respuesta

Alumno:

Se percibe como un sujeto con un  desempeño y aprendizaje escolar pueden llegar hacer modificados desde el exterior.

Es importante hacer ajustes y programar los insumos educativos para obtener conductas académicas deseables.

                       Maestro:

* Desarrolla arreglos de contingencia, reforzamiento y control de estímulos en la tarea educativa.

* Debe manejar los reforzamientos positivos y evitar el castigo.

* No sólo provee modelos sino que les presenta un contexto estimulante que permiten al alumno crear activamente expectativas de le servirán para el aprendizaje.

                   

Estrategia:

Una técnica sistemática que intenta producir en el aula los mismos resultados que en el laboratorio:

•    Definición de objetivos explicita

•    Presentación secuenciada de la información, participación del estudiante.

•    Reforzamiento inmediato de la información,

•    Individualización, registro de resultados y evaluación continua.

Enseñanza:

* El proceso instrucción consiste esencialmente en el arreglo adecuado de las contingencias de reforzamiento con la intención de promover la eficiencia en el aprendizaje del alumno “la enseñanza es simplemente la disposición de las contingencias de refuerzo” (en Hernández, 92).

* La enseñanza consiste en proporcionar contenidos o información, este paradigma ha orientado la enseñanza más hacia la memorización y comprensión que hacia la elaboración de la comprensión.

Aprendizaje:

* Es un cambio estable en la conducta, el alumno adquiere un repertorio conductual, para lo cual es importante el reforzamiento. Cualquier conducta puede ser aprendida.

Evaluación:

El progreso en el programa tiene un indicador: el que el alumno lo haga sin cometer errores.

Los instrumentos de evaluación se conciben y elaboran con base a los objetivos enunciados previamente.

En este paradigma el énfasis de las evaluaciones se centra  en los productos del aprendizaje y no en los procesos.